El resultado del plebiscito, aun cuando por estrecho margen, fue no apoyar el acuerdo final de La Habana. Y es por esto que el país se encuentra, hoy en día, en una disyuntiva aparentemente difícil de resolver, entre paz y democracia, con la consecuente tentación de algunos espontáneos que abogan por desconocer el resultado electoral e implementar el acuerdo.