El reportero del diario digital Meduza, Iván Golunov, reaccionó tras ser puesto en libertad sin cargos por el Gobierno ruso, este martes en Moscú.
El Gobierno cedió a las inéditas presiones sociales antes de que hoy miles de moscovitas saliesen a la calle para protestar contra su detención en una marcha no autorizada. Golunov fue recibido a su salida del edificio del Ministerio del Interior por decenas de periodistas y activistas, que no dejaron de corear su nombre, convertido en los últimos días en un símbolo de la resistencia contra la arbitrariedad policial.