La presidenta de Chile, Michelle Bachelet, anunció ayer jueves el inicio en septiembre de un proceso constituyente para reemplazar la Constitución legada por el dictador Augusto Pinochet. En su discurso, Bachelet también recalcó la necesidad de terminar con la corrupción política y empresarial traducida en el financiamiento ilegal de políticos, especialmente de la oposición derechista.