El gobierno nacional demostró que defenderá los interés de la educación pública en el país, al revolver positivamente su primer gran reto. Alrededor de unos 450.000 estudiantes y profesores de las universidades públicas de Colombia se manifestaron en diferentes partes del país con el objetivo de exigir más recursos para el sector en la primera gran movilización que enfrenta el Gobierno del presidente Iván Duque.
Lo que algunos no saben es que el presidente Duque encontró el presupuesto nacional asignado y agotado y de algún ‘raspe de cucayo’ sacó apoyo financiero para la educación superior en Colombia que tiene un déficit de 3,2 billones de pesos, unos 1.034 millones de dólares, para su funcionamiento y las universidades públicas necesitan además 15 billones de pesos, unos 4.852 millones de dólares, para inversión en infraestructura.
El aporte que hizo el gobierno nacional después de la movilización masiva, es significativo pero no alcanza para solucionar los graves problemas que arrastran las Universidades, debido a la falta de apoyo en el cumplimiento riguroso de los acuerdos establecidos, por parte del Gobierno Nacional. Con la cantidad de dinero que asignó el presiente Duque, se espera que en el presupuesto del próximo año se pueda aliviar la grave crisis de las universidades públicas, que merecen todo el respaldo de los colombianos.
En el caso de la Universidad Nacional, la institución de educación superior pública más importante del país, se advirtió que tiene un déficit para cubrir el pago de salarios de este año y 2019, así como para investigación, extensión, innovación social y para el trabajo con parques científicos y tecnológicos.
El principal problema es que Colombia no tiene una política de Estado para la educación pública y el Sistema General de Educación, por lo que se necesita trabajar en el Gobierno y en las universidades para establecerlo.
Las mayores movilizaciones tuvieron lugar en Bogotá, en donde unas 300.000 personas salieron a las calles desde cinco puntos diferentes para concentrarse a primera hora de la tarde en la Plaza de Bolívar, ubicada en pleno centro de la capital.
Desafortunadamente durante la marcha se vieron excesos que recibieron todo el rechazo de la ciudadana que apoya estos procesos pacíficos en donde se piden el reconocimiento a unos derechos que podrían estar siendo violados; pero eso no debe ser óbice para que algunos estudiantes pintararan letreros alusivos a la protesta en los portales del sistema de transporte masivo de Bogotá, Transmilenio. Y como ejemplo a esta mala acción otros estudiantes ayudaron a los funcionarios de la compañía a limpiarlos.
Las marchas en todo momento estuvieron acompañadas de los profesores, que exigieron respeto para la universidad pública y que en algunos casos utilizaron sus redes sociales para criticar la aparición de un excandidato presidencial y actual senador, para ganar seguidores. Los mismos marchantes repudiaron la presencia del senador y le pidieron que se retirara porque estaba deslegitimando la razón de la marcha que es favor de la educación pública, sin color político ni caudillismo.
En esta primera gran movilización que enfrentó el presidente Duque, quien asumió hace dos meses la Presidencia, reiteró el mandatario de los colombinos que para 2019 están previstos recursos por 39 billones de pesos, unos 12.615 millones de dólares, el más alto monto que haya visto el país para esa área. Adicionalmente, el Gobierno aseguró que reasignará 500.000 millones de pesos, unos 161,5 millones de dólares, para la educación superior pública en el Presupuesto General de la Nación de 2019.
Duque entiende la angustia de muchos jóvenes y sus reclamos porque ellos quieren tener una educación pensada para la cuarta revolución industrial, pero su Administración tiene dificultades para satisfacer todos los anhelos en solo ocho semanas de Gobierno, lo que fue entendido por los manifestantes, a pesar que algunas Universidades no abrieron sus puertas, lo cual es criticable ya que esta acción causa aún más daño en los jóvenes que quieren recibir una educación con calidad y criterio.
Vale la pena recordar que la nueva política educativa contempla el apoyo a los jóvenes que estaban inscritos en el programa “Ser Pilo Paga”, una estrategia que abre las puertas de la educación superior de calidad a quienes tengan excelentes resultados académicos y sean de escasos recursos económicos.
Con la marcha estudiantil se da por establecido el compromiso que tiene el Gobierno con los jóvenes para que tengan acceso a la mejor educación de calidad y para ello ha aumentado el presupuesto y se va a trabajar para lograr que haya una cobertura plena de la educación superior.
