Para pensarlo

Editorial
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El ex jefe negociador de la paz con las Farc, Humberto De La Calle, resultó electo en la consulta interna que se desarrolló en el fin de semana pasado siendo oficialmente el candidato del Partido Liberal Colombiano para las elecciones presidenciales de 2018, cuando se verificara la primera vuelta de las elecciones de 2018 el 27 de mayo. El candidato ganador debe obtener la mitad más uno del total de votos válidos, de lo contrario se realizará una segunda vuelta entre los dos candidatos con mayor votación el día 17 de junio del mismo año. El candidato que gane, solo podrá gobernar por un periodo de 4 años, ya que la reelección fue eliminada por decisión de la Corte Constitucional.


Queda así confirmado el candidato liberal que llevara la bandera de ese partido en la campaña presidencial y que resulta después de consultar internamente a los colombianos, que en una gran minoría, lo eligió en una jornada en donde se gastaron más de 70 mil millones de pesos, dejando como resultado que este tipo de consultas deben ser asumidas por los partidos y no por el pueblo colombiano, pese a que este contemplado en la ley.
De La Calle venció al ex ministro del Interior Juan Fernando Cristo, en una jornada que no ameritaba semejante gasto. El candidato liberal obtuvo 362.229 votos, equivalentes al 53,05 %, mientras que Cristo quedaba con 320.496 papeletas, representadas en el 46,94 %, según datos de la Registraduría Nacional del Estado Civil, autoridad electoral.

Al tratarse de una consulta abierta podían participar los más de 35 millones de electores, pero solo acudieron a las urnas 735.957, lo que supone un 2,09 % del censo, dejado bien claro que este tipo de consultas no es para malgastar los dineros del Estado; al contrario, se deben buscar otros mecanismo para no echar al bote de la basura 80 mil millones de pesos en donde solo participan el 2.09% del censo electoral.

De la Calle comenzó su carrera política en los años 80, aunque el salto a la primera fila lo dio en la siguiente década. Como ministro de Gobierno del ex presidente César Gaviria fue el encargado de liderar el proceso de convocatoria de la Asamblea Constituyente de 1991. Entre 1994 y 1996 fue vicepresidente con Ernesto Samper, del que se apartó a raíz del escándalo del Proceso 8.000, investigación abierta por la presunta financiación del cartel de narcotraficantes de Cali a su campaña presidencial. El entonces vicepresidente y hoy candidato liberal pidió la dimisión de Samper y él mismo se apartó de su cargo.

La jornada electoral transcurrió con normalidad en los 4.428 puestos de votación y 9.438 mesas instalados, muchos de los cuales tuvieron un aspecto solitario durante todo el día.