Otra salida

Editorial
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La salida de la Gran Bretaña el Brexit, ha sido bastante difícil y cada día tiene su afán, a pesar que tienen dos años  para dejar todo listo.
Ahora, Gran Bretaña podría pedir su permanencia en la unión aduanera de la Unión Europea durante un tiempo para evitar un caos de fronteras tras abandonar el bloque. Podría haber una unión aduanera temporal entre Gran Bretaña y la Unión Europea para ayudar a las empresas en la transición a la vida fuera de la misma.

Después, una alianza aduanera futura podría eliminar la necesidad de una frontera para mercancías entre Gran Bretaña y la Unión Europea, ofreciendo  mecanismos aduaneros extremadamente ágiles, extremadamente agilizados.

La salida del Reino Unido de la Unión Europea es un proceso político en curso que persigue el abandono del Reino Unido de la Unión Europea. Esta era una meta política perseguida por determinados partidos políticos, grupos civiles y personas del Reino Unido desde 1973. Salir de la Unión Europea es un derecho de los Estados miembros reconocido por el artículo 50 del Tratado de la Unión Europea. Ya en 1975 se había celebrado un primer referéndum sobre la permanencia del paísen la Comunidad Económica Europea, precursora de la Unión, con resultado favorable a la permanencia. En 2016 se produjo un segundo referéndum sobre la pertenencia, que se celebró el jueves 23 de junio, que arrojó un resultado favorable a la salida de la Unión Europea con casi un 52 % de los votos, frente a un 48 % que abogó por la permanencia.

El resultado no fue uniforme en todo el Reino Unido, votándose a favor de la salida en Inglaterra y Gales, mientras que Escocia, Irlanda del Norte y el territorio de Gibraltar votaron por la permanencia. El gran peso demográfico de Inglaterra y la alta participación en esta nación resultaron decisivos para inclinar la balanza a favor de la salida. En este sentido, algunos analistas señalan la posibilidad de una ruptura del propio Reino Unido, ya que podría traer de vuelta una frontera terrestre a la isla de Irlanda y Escocia votó por permanecer en el Reino Unido en el referéndum celebrado dos años antes bajo la promesa de permanecer en la Unión Europea

En el momento, algunas compañías británicas han acusado al gobierno de vaguedad en la cuestión de si habrá barreras económicas después del Brexit en marzo de 2019. La falta de claridad, 14 meses después de que los británicos votaran a favor de abandonar el bloque, está lastrando a la economía cuando Gran Bretaña abandonará tanto el mercado único de bienes y servicios de la Unión Europea como su unión aduanera.

El mercado único garantiza un comercio sin aranceles de bienes y servicio y está muy ligado por las autoridades europeas a otros derechos, como el derecho de los ciudadanos de la Unión Europea a cruzar las fronteras dentro del grupo.

La unión aduanera permite a las mercancías moverse por la Unión Europea sin trabas, pero también impone aranceles a las importaciones de fuera del bloque. Eso impediría a Gran Bretaña alcanzar nuevos acuerdos de libre comercio mientras permanezca dentro del sistema.

La propuesta británica dice que Gran Bretaña debería ser libre para negociar nuevas relaciones comerciales durante el periodo de transición, algo que las autoridades europeas probablemente encuentren problemático; la Unión Europea ha dicho que el objetivo declarado de Londres de comercio sin fricción es imposible fuera del mercado único y la unión aduanera. El gobierno británico intenta desmentir las afirmaciones de sus interlocutores europeos de que está poco preparado para las conversaciones del Brexit antes de la nueva ronda de conversaciones que se celebra a final de mes en Bruselas.

Las propuestas aduaneras son las primeras de una serie de documentos que abarcan asuntos complicados en las negociaciones. Se espera que otro de ellos, sobre la frontera terrestre entre Irlanda del Norte y la República de Irlanda, se publique esta semana. La Comisión Europea dijo haber tomado nota de las sugerencias británicas, pero sólo las abordaremos una vez hayamos hecho suficientes progresos en los términos de la salida ordenada, del bloque.

La Unión Europea espera que las negociaciones sobre su relación futura con Gran Bretaña no pueden comenzar hasta que se hayan hecho suficientes progresos en tres temas iniciales: cuánto dinero tendrá que pagar Gran Bretaña para cubrir sus compromisos pendientes con el bloque, si se instauran controles de seguridad y aduanas en la frontera irlandesa y la situación de los 3 millones de ciudadanos de la Unión Europea que viven en Gran Bretaña.