La Policía capturó este martes a cinco integrantes de una organización delictiva que por encargo de la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN) puso los petardos que hicieron explosión en las últimas semanas en Bogotá, según las autoridades.
"Esta organización prestaba sus servicios al mejor postor, y tenemos la claridad que venía recibiendo dinero y siendo contratada por estructuras del ELN, que alquilaba sus servicios para colocar artefactos explosivos en la ciudad", manifestó en una rueda de prensa el ministro de Defensa, Juan Carlos Pinzón.
Las autoridades sólo suministraron la identidad de uno de los detenidos, Wilmer Johan Cañón Cañón, alias "Pedro", quien según dijo el ministro, tenía vínculos directos con el ELN y contactaba a personas para preparar e instalar los artefactos explosivos.
Según Pinzón, la Policía llegó hasta la banda con el apoyo de la Fiscalía y las Fuerzas Militares gracias a "seguimientos, trabajos de inteligencia e información ciudadana".
En Bogotá fueron registradas desde febrero al menos cinco explosiones de petardos en diferentes barrios, la última de las cuales ocurrió el pasado 12 de marzo en el sector de Quiroga, en el sur de la ciudad, al paso de un vehículo de la Policía, atentado que dejó tres civiles y cinco policías heridos.
El director de la Policía Nacional, general Rodolfo Palomino, aseguró que con esta operación, realizada en diferentes sectores de Bogotá, se impidieron dos nuevos atentados que al parecer tenían como objetivo instalaciones policiales de barrio conocidas como Centros de Atención Inmediata (CAI).
Palomino señaló que las investigaciones comprobaron la hipótesis policial de que las explosiones tenían relación con el ELN "y hoy podemos decir que eso ha sido confirmado".
La operación permitió además la incautación de cuatro barras de explosivos, dos temporizadores, tres armas de fuego, munición de guerra y material de uso privativo de las Fuerzas Militares, elementos con lo que la banda pretendía efectuar los nuevos atentados, según la Policía.