El municipio de Florencia, Caquetá, amaneció conmocionado ayer jueves, luego de que la Policía y la Fiscalía adelantaran un operativo en las primeras horas, con el que capturaron a la alcaldesa María Susana Portela, su esposo, dos secretarios y a 11 concejales.
De acuerdo con las autoridades, estas personas tendrán que responder por el supuesto ofrecimiento de dádivas por parte de la administración distrital hacia los cabildantes para que estos ampliaran el cupo de endeudamiento del municipio por encima de los parámetros establecidos.
Por su parte, el vicefiscal general, José Fernando Perdomo, confirmó la información al señalar que lo sucedido en Florencia es "un grave episodio de corrupción".
"Lo que la Fiscalía ha logrado establecer y ha podido comprobar es que mediante un pacto entre la alcaldesa, su esposo Diego Luis Rojas y algunos asesores del despacho, acordaron de manera ilícita comprar la función pública de 13 concejales de Florencia", manifestó Perdomo a periodistas.
El funcionario agregó que la idea era "de manera manifiestamente contraria a la ley, aprobar un acuerdo que permitiera el endeudamiento del municipio de Florencia por un monto superior al que financiera y legalmente tiene capacidad".
La investigación de la Fiscalía vincula a la Alcaldía con los delitos de peculado por apropiación en favor de terceros, celebración de contratos sin requisitos legales y prevaricato por omisión.
Esta es la segunda vez que Portela es detenida durante su administración. La primera fue en febrero de 2014 por supuestas irregularidades cometidas en la celebración de un contrato para la construcción de 79 viviendas para familias pobres en un barrio de la ciudad.
Florencia es una ciudad de unos 170.000 habitantes situada en la región amazónica de Colombia y una de las más golpeadas por el conflicto armado por la actividad de grupos guerrilleros y narcotraficantes en la zona.
