Con pronóstico reservado permanece en el hospital universitario de Neiva, el menor de once años, que resultó gravemente herido tras manipular de manera accidental un artefacto explosivo en el sector de la vereda El Quebradón del municipio de Íquira en el occidente del Huila.
El comandante (E) de Policía Huila el coronel Johanes Bejarano, dijo que a raíz de las graves heridas, los galenos del centro asistencial tuvieron que amputarle los dedos de la mano izquierda al pequeño víctima de la mina antipersonal.
Cabe anotar, que en lo corrido del segundo semestre del presente año ya son dos los menores víctimas de los campos minados en el Huila abandonados por grupos al margen de la ley que hicieron presencia en la zona, según las autoridades.