Nuevo caso de corrupción en recursos para la alimentación infantil, ahora en Chocó

Frente a este hecho de corrupción, la Fiscalía imputó cargos a cinco personas pertenecientes a la Fundación Jardines Luminosos, que desde el año 2007 tenían varios contratos para suministrar los alimentos.

Pese a que Inés Asprilla  fue quien se hizo acreedora del contrato por medio de la Fundación, según las investigaciones adelantadas por la Fiscalía, quien tenía el dominio de los gastos era Reynaldo Palacios Córdoba, quien utilizó el dinero de los recursos para pagar cuentas personales y los costos de una remodelación en la sede de Jardines Luminosos. También desembolsó gruesas cantidades a una empresa de cemento, una inmobiliaria y otra empresa de su propiedad que se dedicaba prestar servicio de aseo y limpieza en varias entidades públicas del departamento.

Por si fuera poco, se encontró que más de 501 individuos que figuran como beneficiarias del programa de alimentación son ‘personas fantasmas’. Y además, el dinero que sí se gastó en la compra de comida, fue a parar a otra proveedora de alimentos de Palacios Córdoba, en los que se ofrecían productos a una calidad menor que la ofrecida en la licitación.

Esta Fundación no tenía personalidad jurídica y antes tenía el nombre de Funomiser, que fue modificado luego que en el 2014 el periódico El Tiempo denunciara que un poderoso narcotraficante de Buenaventura utilizaba una camioneta blindada de la organización para movilizarse a sus anchas.

Sin embargo no es el único caso, puesto que se adelantan investigaciones por irregularidades en 13 de los 32 departamentos del país. Ya en el Huila, la Fiscalía capturó a contratistas de ‘La Comunidad los Girasoles’ que se habrían apropiado de 834 millones de pesos que tenían como fin suministrar alimentación a 974 niños y mujeres embarazadas.