Entre las personas investigadas también figura el exgerente de proyectos de infraestructura, Efraín Vargas Corvacho, así como Javier De la Hoz Bolano, quien es representante legal de Ingenieros y Arquitectos Asociados Ltda, y que en su momento fungió como interventor del contrato.
De acuerdo con las pesquisas sobre este caso, las construcciones de los pozos profundos para el abastecimiento de agua potable iniciaron en abril de 2014, luego de la declaratoria de calamidad pública ordenada por Caicedo en marzo del mismo año. Al parecer, en la celebración del contrato no se habría garantizado la idoneidad del contratista para desarrollar dichas obras.
Sumado a ello, tampoco se trató de la oferta más favorable para la entidad, mediante de exigencia de requisitos específicos, capacidad financiera y de organización proporcional y adecuada al precio del objetivo contractual, ni mediante consagración y calificación de requisitos técnicos y de calidad.
En el caso de Efraín Vargas, este suscribió estudios previos, al parecer lo hizo con desconocimiento de los principios de igualdad, transparencia y economía que rige la función administrativa y de contratación. Mientras que De la Hoz es señalado de no exigir al contratista el uso de equipos adecuados para las obras de perforación que establecía Metroagua S.A. E.S.P.
