Fuertes disturbios se generaron al mediodía de ayer sábado, cuando miembros de la Policía Metropolitana intentaron controlar las alteraciones de orden público que se estaban registrando por un desalojo a vendedores ambulantes en las afueras del Mercado Público de esta ciudad.
Según las primeras informaciones, varios niños que se encontraban en el lugar resultaron afectados por los gases lacrimógenos, que debieron usar los uniformados para controlar las alteraciones.
Al parecer, los disturbios se presentaron porque algunos vendedores de los alrededores de la despensa pública no querían ser desalojados de los sitios donde vienen trabajando con sus ventas ambulantes.