Hasta las oficinas de la Defensoría del Pueblo de la ciudad continúan llegando familias deportadas desde Venezuela, quienes lograron salir del país vecino por trocha, por Paraguachón, Guajira, con la esperanza de recibir y/o solucionar su situación.
El periódico EL INFORMADOR, estuvo en la instalación de la Defensoría del Pueblo y habló con varias familias afectadas por este caso que ha conmovido a toda una nación, esto sin medir cuales son los pasos a seguir para las personas que esperan rehacer su vida en este país.
Es el caso de la familia Cerrano Pérez, quienes llegaron desde hace dos meses a la ciudad, recién empezara el drama que une a estos dos países.
“Yo me entere de la orden que dio el presidente Maduro y recibí amenazas que si yo era colombiana me alejaban de mis hijos que son venezolanos y mi marido también, por lo que hui del lugar trayéndome solamente la ropa, y el resto de mis cosas quedaron allá, aquí voy a inicia una nueva vida y no sé cómo lo voy hacer”, agrega Leidy Pérez, nacida en Colombia, pero criada en Venezuela, sin documentos de allá.
Leidy Pérez, quien espera junto a su familia que el Gobierno Nacional les pueda brindar la ayuda que ha prometido y poder registrar a su hijos de 9 y 6 años de edad como colombianos.
Según cifras, se estima que a la oficina de los derechos humanos, han llegados más de 60 personas deportados desde Venezuela, donde además denuncian maltratos tanto verbal como físico de las autoridades venezolanas.
Se estima que más de 200 colombianos han entrado al país, para legalizar sus documentos y rehacer una vida en territorio colombiano.
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