El Gobierno Nacional sigue planeando cómo será la situación particular del posconflicto en Colombia, en desarrollo del proceso de paz que se adelanta con las Farc.
Una de las preocupaciones que se tiene es cómo será la llegada del Estado a las zonas donde actualmente hay conflicto y cómo se financiará este mismo proceso.
El ministro para el posconflicto, general (r) Óscar Naranjo, dijo que desde ahora el Gobierno busca la solidaridad de los empresarios para que aporten a esta causa. Aunque no dijo que la intención es establecer nuevos impuestos, insistió en la necesidad de los aportes del sector privado.
“Deberíamos generar en Colombia un movimiento solidario de empresarios y del sector privado para que se sume a esta causa de construcción de la paz”, manifestó en el Congreso.
Según el oficial (r), la construcción de la paz, con o sin acuerdo, demanda de manera inmediata cerrar unas brechas que vayan acercando al país rural y urbano.
“Es necesario ir eliminando la inequidad en Colombia para permitir que más colombianos tengan acceso a bienes y servicios.
Los colombianos deberían ser conscientes de que los dividendos de la paz no solamente llegarán a las víctimas directas de la guerra y el conflicto sino también a cada colombiano porque poner fin al conflicto lo que significa es la gran oportunidad de fortalecer la democracia y mejorar los niveles de equidad
La tesis del Gobierno está focalizada en que se quiere llevar a los territorios apartados del país que son parte del conflicto, mucha más presencia institucional.
En ese sentido, Naranjo confirmó que hay ofertas de la comunidad internacional para aportar al posconflicto. “Esperamos canalizar esos recursos para concretar los proyectos”, agregó.