El Departamento de La Guajira, vive una crisis educativa, que demuestra la fragilidad de un sistema de contratación que vulnera los derechos de los niños y jóvenes de acceder a una educación de calidad, en condiciones dignas y de manera oportuna.
El caso más dramático lo presenta el internado de Aremashain, donde aún no se han iniciado labores académicas en lo que va del año 2014.La razón, es la falta de contratación, de unos 57 trabajadores entre administrativos, docentes y auxiliares del internado. Con esta parálisis, se afectan cerca de unos 1200 estudiantes desde el pre-escolar hasta el grado 11. Además, se ha ocasionado una deserción escolar calculada en 56 niños.
La Asamblea Departamental, acudirá a la figura de emergencia educativa para conjurar la crisis. Por otro lado, el pasado 27 de Marzo, estudiantes del Sagrado Corazón de Jesús en el municipio de Manaure, se tomaron la institución educativa para exigir que los 17 maestros que laboran actualmente en esa institución se le firme su contrato, que garantice el pago de los salarios.
La toma culmino, con una reunión en la que participaron funcionarios de la alcaldía municipal, la secretaria de educación departamental e integrantes de la comunidad educativa. Se concluyó, que el próximo 1 de abril, se llevaría a cabo en las instalaciones de la secretaria de educación departamental una mesa de trabajo, que arroje como resultado el mecanismo a utilizar para la firma del contrato de los docentes afectados.
En el centro Etno-educativo La Gloria (Manaure), la situación no es mejor, en tanto que unos 60 maestros, también laboran sin la firma de un contrato que garantice el pago de sus salarios. Directivos sindicales opinan sobre la crisis de la contratación en la educación pública en La Guajira. Julio García, dirigente de la Cut, señalaba que "La falta de voluntad política de la administración departamental y de los municipios certificados en atender la educación del sector indígena, reflejan un menosprecio sobre estas comunidades". La crisis existente, tiene que ver, según este dirigente con las "contradicciones entre las organizaciones indígenas que contratan y las administraciones del orden departamental y municipal que no buscan un mecanismo ágil y eficaz, para ponerse de acuerdo".
Fabio Herrera, presidente de Asodegua, por su parte mencionaba la inestabilidad política del departamento de la Guajira como un evento que ha generado prevenciones con relación a los procesos de contratación. Dice además, que "la voracidad de las O.N.G han generado todo tipo de enredos para apropiarse de las contrataciones de tal manera, que las autoridades tradicionales no toman decisiones basados en la objetividad, sino por la presión que ejercen los aspirantes al contrato".
José Bonilla dirigente sindical del Sena, enfatizaba, que la tercerización aplicada a cualquier forma de educación es perjudicial. La experiencia que tenemos en el Sena en este sentido es muy diciente. Esta política, de la tercerización ha afectado notablemente la formación profesional (teórica-practica) que se imparte en el Sena.