Hace cuatro años la tierra se tragó Gramalote

Nacional
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Después de cuatro años, lo único que se vislumbra a lo lejos es el campanario de la Iglesia San Rafael, en el desaparecido Gramalote, una población que por una falla geológica quedó en ruinas, en Norte de Santander, lo demás está sumido en una vasta vegetación.

La tragedia afectó a más de 850 familias, que después de tanto tiempo, anhelan que el gobierno les cumpla un anuncio de reconstrucción de un pueblo, que ha estado lleno de obstáculos, promesas, esperanzas e ilusiones, por un sueño que aún no se levanta en la realidad.

Cecilia Orozco, una mujer gramalotera, a medida que avanzan los días lamenta el panorama "acá no hay nada, puro monte, tienen gente cuidando y les pagan. Yo ya no creo en esto, el presidente ni se acordará de nosotros, esto es un fracaso, no voy a ver al nuevo Gramalote".

Néstor Velandía, habitante de Gramalote, dice que "la esperanza no se ha perdido todavía pensamos en el 2015, donde nos prometieron levantar parte del pueblo. Hay muchas cosas en las que no estamos de acuerdo con el Estado, hay un proceso de licitación y anuncio de primeras obras, esperemos a ver”, dijo.

Mientras tanto un grupo de 300 gramaloteros, decidieron romper la espera y empezar por sus propios medios, obras que a pico y pala vienen liderando para lograr un nuevo reasentamiento cerca al desaparecido pueblo.

Francisco Moreno es uno de ellos. Asegura que "se perdió todo en Gramalote, el drama día a día crece más, estamos huérfanos de un gobierno que se olvidó y que sigue prometiendo lo que no ha cumplido. Por eso organizamos rifas, bazares, nos quedan ganancias de tres millones de pesos y poco a poco hemos ido recogiendo, abonando y vamos a demostrar que si somos capaces”.

Agregó que se han invertido millones y millones en estudios, proyectos y no hay nada. "Ya hicimos parte de una vía a Pomarroso y tenemos el agua ahora vamos a trabajar en acueducto y alcantarillado y lo vamos a sacar adelante”.

La Alcaldesa del municipio, Sonia Rodríguez admitió que la tramitología ha asfixiado el proceso de reconstrucción, "todo ha sido difícil, el desarraigo de los gramaloteros y todo lo que esto implica, pero creo que también el Fondo Nacional de Adaptación falló en no consolidar un equipo único.