Una auditoría realizada por la Contraloría General, y publicada en noviembre de 2015, ya advertía serias fallas en planeación contractual en el proyecto de remodelación del estadio de fútbol Guillermo Plazas Alcid, de la ciudad de Neiva.
Un factor que generó atrasos y problemas en la ejecución de las obras. (Lea: Tres personas murieron tras desplomarse tribuna de estadio en Neiva). Según informó el ente de control, tras una revisión de los contratos de Obra No. 1758 de 2014 e Interventoría No. 1760 de 2014, esa deficiencia en la planeación hizo que no se hiciera “un análisis preciso de las cantidades de obra necesarias para ejecutar toda la meta física de la obra y del proyecto contentivo de la misma”, y que se hace en evidente en demoliciones y retiro de elementos y estructuras, entre otros.
Se cuestiona la suscripción de diferentes contratos u órdenes de servicios con personas naturales de las cuales se podría derivar un conflicto de intereses.