Según los expertos, las personas invierten con el objetivo de madurar su capital en compras de casas o apartamentos, para luego alquilar o vender a un mayor precio.
Lo lógico pareciera que las familias colombianas compraran casas nuevas para habitarlas, sin embargo, este panorama no es 100 por ciento de esta manera. Existe un grupo de personas quienes aprovechan cada oferta para invertir en bienes y raíces, un negocio redondo cuando se quiere “engordar una propiedad”.
Según los expertos, este grupo de personas invierte con el objetivo de madurar su capital en compras de casas o apartamentos, para luego alquilar o vender a un mayor precio al que lo adquirieron.
¿Qué dice Camacol?
Camacol reveló en una encuesta en este caso posventa, realizada en octubre del 2016 a 200 hogares, a los cuales se les entregó una casa o un apartamento en los últimos doce meses, a julio del 2016.
Los resultados volvieron a ubicar en la punta de la lista a quienes compraron la vivienda para habitarla: 85 por ciento. Sin embargo, esta vez quienes la adquirieron para alquilarla o venderla pasó a 20 por ciento. Y este año ese número podría subir, si se tiene en cuenta que, por ejemplo, el subsidio a la tasa hipotecaria que impulsa el Gobierno permite adquirir una segunda vivienda en el rango de precios de 99,7 a 247 millones de pesos. Incluso, las proyecciones de ventas en este segmento son de 13,2 por ciento, según Camacol.
El Ministerio de Vivienda ha movilizado 50.000 cupos para respaldar la adquisición de esta oferta desde el 2016, de los cuales se han desembolsado 17.277, aunque no hay un dato que revele cuántos han invertido en una segunda casa.
El rendimiento anual que ofrecen títulos y otros papeles, que puede ser del 6 por ciento, la finca raíz da una rentabilidad similar a través de los cánones de arrendamiento, a la que se le suma un promedio anual de 5 a 7 por ciento, producto, precisamente, de esa valorización “lo que representa una ganancia de más del doble”.
En este entorno valdría hacer una cuenta final de inversión: si el nuevo dueño la quiere alquilar tras la entrega, una proyección más moderada se podría hacer con base en el Índice de Precio de Vivienda Usada del Banco de la República del tercer trimestre del año pasado, que frente al mismo periodo del 2015 fue de 2,4 por ciento en términos reales.
Sin lugar a dudas, el repunte del sector inmobiliario en el país es un tema que no solo ha beneficiado a firmas constructoras, arquitectos, y en general a todos los involucrados en este medio, sino que también le ha dado un nuevo aire a las ciudades, transformando espacios y brindando diversidad de opciones de inversión para todos aquellos que desean ingresar en el negocio de la finca raíz.
Santa Marta sigue creciendo
Según las estadísticas, la construcción tuvo un estancamiento entre 1998 y 2004 por diferentes motivos que afectaron a este sector de la industria.
Sin embargo, desde el 2004 las cosas empezaron a mejorar en este tema y actualmente el negocio sigue firme, el turismo ha sido uno de los grandes aliados para estos temas, figuras como los futbolistas James y Falcao han comprado en la capital del Magdalena.
La renovación urbana y el crecimiento de la ciudad son los puntos más altos para conseguir un gran status en el mercado de la construcción.
Aspectos importantes
Entre estos aportes para el crecimiento en este mercado está la construcción en el 2006 de dos centros comerciales que crearon un entorno favorable en los sectores donde fueron ubicados, la trasformación del Centro Histórico que trajo consigo la valorización de la zona, con la construcción y apertura de hoteles boutique, bares y restaurantes, los cuales en un 80 por ciento son propiedad de extranjeros, en especial españoles; lo que significa que el interés por invertir en Santa Marta traspasa las fronteras.
Otro de los aspectos que le ha favorecido a la ciudad para el fortalecimiento de este mercado son el mejoramiento de sus vías y se espera que con los Juegos Bolivarianos la ciudad se venda aún más para seguir creciendo en distintos puntos.