Juan Lucas Restrepo, director Ejecutivo, señala que en el departamento además del banano y la palma también son claves la fruticultura y la ganadería. Asegura que los palmicultores cuentan con el soporte institucional para enfrentar la pudrición de cogollo (PC). Y promueve una ley que busca que la innovación en el agro sea dinámica y permanente.
¿Cuál es la importancia que tiene una institución como Corpoica para el desarrollo productivo del departamento del Magdalena?
Juan Lucas Restrepo (JLR): Desde nuestro centro de investigación Caribia en Magdalena, Corpoica busca generar y transferir oferta tecnológica relevante para todas las actividades agropecuarias del Departamento. No solo por la investigación que se desarrolla en ese lugar, sino porque desde allí se apalanca conocimiento de otros centros de Corpoica y se ayuda para que la tecnología ofrecida por otros actores también se articule regionalmente.
¿Qué necesidades tiene el sector agropecuario en esta zona del país?
JLR: A veces se simplifica el panorama agropecuario del departamento como si este fuera solamente banano y palma. Aunque claramente son los dos renglones más significativos y en consecuencia los apoyamos, el departamento es clave en otros temas como la fruticultura y la ganadería y tiene grandes oportunidades en sectores como la horticultura y el marañón, entre otros. En consecuencia, Corpoica debe comprender este panorama amplio y apoyar desde la ciencia y la tecnología la solución a sus problemas y la concreción de sus oportunidades.
¿Cuáles son los principales cultivos que se trabajan en el Centro de Investigación Caribia, ubicado en la Zona Bananera que son de gran valor para la economía del departamento?
JLR: Corpoica desde Caribia y desde sus otros centros, apoya la agricultura del Departamento en cultivos clave como mango, cítricos, ahuyama, ajíes, plátano, banano, palma, marañón, cacao, yuca y batata, entre otros. También apoya en el sector pecuario en bovinos y ovinos. Toda la agricultura del departamento cuenta con nuestro apoyo.
Últimamente los productores de palma en el Magdalena se han visto afectado por la pudrición del cogollo, una de las enfermedades más devastadora en este cultivo ¿En qué alternativa está trabajando Corpoica para contrarrestar esta problemática?
JLR: Afortunadamente en Caribia establecimos desde hace algunos años lotes de híbridos de palma de aceite en los que no solo están nuestros materiales, sino otros de distintas casas comerciales que pueden ser visitados. Esto les permite a los productores que quieran renovar sus cultivos afectados validar la tolerancia de los mismos al PC y evaluar otras características que les interesen para tomar mejores decisiones. Cenipalma también tiene presencia y acciones directas en la zona por lo que los productores, a pesar de su coyuntura difícil, cuentan con el soporte institucional para sortear de la mejor manera este fenómeno.
Corpoica acaba recibir un terreno en el sur del Atlántico que ustedes lo han llamado finca experimental La Trinidad. ¿Concretamente, qué se hará allí?
JLR: La finca “La Trinidad” es un lugar dedicado a la validación, ajuste y vinculación de oferta tecnológica de Corpoica. Será una vitrina en la que compartiremos nuestra oferta tecnológica y experiencias productivas con nuestros vecinos del Sur del Atlántico y de otras zonas. Seremos un agricultor y ganadero más de la zona. Un buen vecino dispuesto a compartir sus conocimientos y aprender de los demás para en conjunto ayudar a que el sector agropecuario y el bienestar de los productores de la región mejoren sistemáticamente.
¿Cómo se va a integrar las actividades que se realizarán en Suan con los centros de investigación que tiene Corpoica en la región, por ejemplo, con Caribia en el departamento Magdalena?
JLR: “La Trinidad” será administrada desde Caribia, pero recibirá, en términos de conocimiento, el apoyo de todos los centros y las redes de innovación de Corpoica independientemente de dónde se haya generado.
En el congreso se está debatiendo sobre una ley que busca crear el Sistema Nacional de Innovación Agropecuaria ¿Cuál es su importancia?
JLR: Esa Ley es clave. Plantea un nuevo marco institucional que define claramente objetivos, roles y responsabilidades para que la innovación en el agro sea dinámica y permanente. Integra la investigación con la formación y la extensión desde lo nacional hasta lo local. Nuestro sector necesita esa Ley para progresar más rápidamente y con mayor equidad.
¿Por qué avanza a paso lento el debate?
JLR: Se le han cruzado en el camino coyunturas políticas asociadas al nuevo debate electoral y temas como el cambio de Ministro de Agricultura. Con el nombramiento del nuevo Ministro, Juan Guillermo Zuluaga, espero que el debate se dinamice y logremos contar con esta ley tan importante antes del 30 de noviembre cuando se acaba el fast-track.
En tiempos de posconflicto ¿Cuál cree usted que es el principal reto que tiene el Estado con el campo colombiano?
JLR: El Estado nunca ha sido particularmente eficiente para atender la problemática y promover oportunidades en el sector rural y en lo agropecuario. Se avanza, pero a ritmos menores a lo posible. El posconflicto exige un mayor esfuerzo frente a lo que se ha hecho tradicionalmente. Esto implica un riesgo en términos de desempeño, pero también una gran oportunidad en la medida en que se concreten la voluntad política y mayores capacidades y recursos, que ejecutados con transparencia y de manera coordinada podrían generar cambios positivos enormes.
¿Finalmente, qué papel desarrollaría Corpoica en esta etapa?
JLR: Corpoica ha fortalecido sus capacidades técnicas en los últimos años. Estas capacidades sumadas a nuestro conocimiento y ánimo de servicio nos convierten en actores relevantes para trabajar desde lo tecnológico en esta nueva etapa. Estamos desarrollando en este sentido acciones importantes y estamos prestos a que nos incorporen en todas aquellas iniciativas en las que podamos agregar valor.
