El negocio de las empanadas visto como una alternativa de empleo

La informalidad empresarial, definida como las compañías que no cumplen plenamente con la legislación tributaria, laboral, ambiental y comercial, entre otros requisitos, representa un obstáculo importante al desarrollo económico del país.

Sin embargo, lo que resulta por un lado poco conveniente para el desarrollo económico de una Nación, termina siendo beneficioso para la economía del bolsillo de un particular.

No solo para el que está creando un negocio solventa sus gastos personales, sino también, al gremio universitario. Y es el famoso negocio de fritos ubicados a las afueras de la Universidad del Magdalena, que además de facilitarle algo práctico y económico para saciar el hambre del día, también ha sido una fuente de empleo para muchos.

Tal es el caso de Sandro Nova, un santandereano quien llegó a santa Marta hace 16 años a probar suerte debido a la falta de oportunidades y decidió emprender su propio negocio de empanadas  a las afueras de la Unimag siendo estudiante de esta alma máter donde llegó hasta quinto semestre.

Poco a poco se fue dando cuenta que era un negocio exitoso por razones como la ubicación la cual es estratégica ya que atiende a los universitarios, profesores y residentes de la zona, él les resuelve el desayuno, almuerzo y cena, especialmente a los estudiantes con su combo de empanada y un jugo de naranja por $2.000, cuyas ventas dio a entender que podrían ser de 500 unidades en adelante a diario, aunque aseguró que esas cifras “eran secreto de estado”.

Este comerciante aseguró que gracias a su negocio ha podido conseguir lo necesario para poder vivir dignamente, además de darle empleo a otras tres personas más, sin tener la intención de desempeñar otro oficio, aunque en los últimos años ha tenido sus altibajos por la competencia, dijo.

Al frente del negocio de las empanadas ‘Sandro’s’,  se instaló otro negocio de venta del mismo producto desde hace un año y ha obtenido una buena oleada de ventas y que progresivamente subió el número de empleados a 10 en ‘Fritos Cheos’, la mayoría son venezolanos que han llegado con sus papeles en regla para ejercer su trabajo.

Desde muy temprano los clientes se alistan para pedir su famoso combo de jugo con empanada por un precio de $2.000, algunos pueden comprar hasta tres veces al día para 'amortiguar' la jornada académica y ahorrarse un almuerzo que les puede costar desde $7.000. Esto le puede estar generando al negocio ventas hasta de 1.300 unidades.

Para Angie Primera, de 36 años, considera que este negocio ha sido un recurso indispensable para la economía de su hogar que le permite cubrir lo necesario.

“Los universitarios nos conocen como lo venezolanos, aquí hemos tenido una gran acogida, pese a que la competencia nos ha visto con recelo por los precios que manejamos, pero esto lo hacemos pensando en los estudiantes que siempre buscan algo rico y económico para comer”.

Así como estos dos negocios, se encuentran muchos más que se han creado por los mismos motivos y que de alguna manera generan empleo.

Según el más reciente informe del Dane, Santa Marta se mantiene entre las ciudades de menor tasa de desempleo del país.

Niveles de empleo

 Durante el trimestre móvil comprendido entre junio y agosto de 2018, el Distrito sigue manteniéndose entre las ciudades con la tasa más bajas en los indicadores del mercado laboral con el 8.4% .

 Las ramas de actividad que más contribuyeron al aumento de la ocupación el trimestre se destacan: Comercio, hoteles y restaurantes con 33,81%.

Para la actividad productiva

Ante la situación actual sobre los recursos de empleo que se han formado por los alrededores de la Unimag, para Aura García, Secretaria de Desarrollo Económico y Competitividad, enfatizó que el Distrito tiene la prioridad de generación de empleo de calidad y en este sentido la informalidad laboral es el principal obstáculo a solucionar.

“Hemos trabajado en varios programas para mejorar esa calidad del empleo, uno de ellos es el programa Incuba Santa Marta, dirigido a los microempresarios que acompaña a los vendedores en condición de informalidad hacia la formalidad, entendido que tengan el Registro Mercantil, el Registro Único Tributario , permiso de uso del suelo, que la actividad comercial que se está realizando vaya acorde con el concepto del lugar donde vende y que haga su contribución de Industria y Comercio en el Distrito”.

La funcionaria explicó que dentro del programa están haciendo un proceso de capacitación y asesoramiento a los vendedores e indicarles cual es la ruta que deben seguir para formalizarse. De esta manera lo han hecho con comerciantes del Centro Histórico, El Rodadero y en el balneario turístico de Taganga.

Asimismo, aprovechó para hacer la invitación a los vendedores que se encuentran ubicados en las afueras de esta zona universitaria, “esta alternativa no es una camisa de fuerza, es un acompañamiento que hace el Distrito para enterarlos sobre los beneficios de la formalización de la unidad productiva”.

Algunos integrantes de este gremio que pertenece en la informalidad, ha señalado que una de las causas de la informalidad empresarial es el desconocimiento sobre los trámites y requisitos que debe cumplir una actividad productiva, tanto por parte de los empresarios como de las entidades públicas. Algunas de estas, solo conocen una fase o un trámite del proceso que es de su competencia y desconocen el resto, por lo cual no facilitan la formalización.