A 70 años de conmemorarse el magnicidio del caudillo liberal Jorge Eliécer Gaitán, presentamos la conexión de quien decían iba a convertirse en presidente de Colombia con un hecho que también marcó la historia del país: la Masacre de las Bananeras en en 1928.
Por Mario Ibarra Monroy
Redacción EL INFORMADOR
Lo que más conocen los colombianos amantes de nuestra historia sobre el nombre de Jorge Eliécer Gaitán es que si no hubiera sido asesinado la mañana del 9 de abril de 1948, era de seguro Presidente de Colombia.
La faceta de gran orador, de quien en sus discursos impregnaba una dura crítica a la política de entonces, incluso incomodando a sus propios copartidarios liberales, fue también exaltada en su biografía, dando sobrados méritos para convertirse en uno de los granes políticos del siglo XX.
Pero Jorge Eliecer Gaitán se dio a conocer por un caso que está muy relacionado con las raíces propias de la historia del Magdalena a comienzos del siglo pasado. La situación laboral de los trabajadores bananeros, pagados por la multinacional United Frui Company, fue su obsesión poco antes de posesionarse como congresista en 1929, este abogado de la Universidad Nacional con maestría en Roma.
“Tenía un vivo interés por asistir a aquella Cámara de Representantes para continuar una campaña que había iniciado en la revista “Universidad” de Germán Arciniegas, sobre los sucesos de la Zona Bananera”, había expresado el personaje en una entrevista titulada: Gaitán ante sí mismo, publicado por el periódico El Siglo en julio de 1943.
Allí en un tono de denuncia expresó que la atención la había focalizado en la revuelta de los comunistas contra la UFC, turbándose el orden público, enterándose en algunas versiones de numerosos muertos por las protestas y de otras personas condenadas en tribunales de guerra de 20 a 25 años de cárcel. “Todo ello fue en medio de la indiferencia de la opinión pública y la justificación de los periódicos de todos los partidos”, comentaba.
“Mi reacción la motivó lo único que me era dable conocer, o sea, el aspecto legal, que lo encontraba arbitrario”, decía en entrevista Gaitán.
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Entra en la batalla
Una vez obtuvo su credencial como congresista y ya habiéndose restablecido el orden en la Zona Bananera, luego de los sucesos del 6 de diciembre de 1928, se fue para el sitio para así adelantar una investigación personal.
“Los documentos y las pruebas que recopilé demostraron luego que lo sucedido allí había sido una gran hecatombe”, afirmó.
El país se estremeció, pues si bien había pasado un año de lo sucedido, solo hasta entonces vino a saberse lo que en realidad había ocurrido.
Su finalidad concreta era hacer que treinta o más obreros que cumplían condenas de 10 a 25 años obtuvieran la libertad por medio de un proyecto de ley de amnistía. Al final lo logró.
Debates triunfales
Pero lo que catapultó hacia el éxito político y que le adjudicó el título de “Tribuno del pueblo” fueron sus cuatro debates entre el tres y seis de septiembre de 1929 ante el pleno de la Cámara de Representantes donde expuso con excelsa oratoria y pruebas recopiladas en su visita anterior a Ciénaga y la zona bananera, lo que podría considerarse el primer gran falso positivo de la historia de Colombia.
“ En las casas de la United Fruit desarrollaban orgías de oprobio y de vergüenza. Las mujeres respetabilísimas y nobles de aquellos pueblos, eran obligados por la fuerza a asistir a las bacanales de los militares”. Debate Cámara de Representantes,septiembre 1929.
“Muchos de los presos eran llevados a las cárceles porque se habían negado a vender sus pequeñas propiedades a los mercenarios de la United Fruit Company. Los hombres eran sacados de sus viviendas y cogidos a palo, robados y esquilmados”.“Muchos de los presos eran llevados a las cárceles porque se habían negado a vender sus pequeñas propiedades a los mercenarios de la United Fruit Company. Los hombres eran sacados de sus viviendas y cogidos a palo, robados y esquilmados”. Bogotá, 3 de septiembre, 1929.
