La diputada de la Asamblea Nacional y exprecandidata a la Presidencia de Venezuea, asegura que el Gobierno de su país se propuso llevar a cada venezolano al límite de la indignidad, de la violencia, de la miseria y del silencio. “Creyeron que con ello nos quebrarían no solamente física y económicamente, sino moralmente, pero no lo lograron”.
“Estamos en la calle decididos a salvar a Venezuela y a reconstruir una tierra prospera, libre, democrática”. La líder de la oposición en Venezuela, María Corina Machado, habló en exclusiva con EL INFORMADOR, en el marco de la consulta popular del pasado domingo 16 de julio, propuesta por la oposición a nivel internacional, para que los venezolanos manifestaran su rechazo en contra de la Asamblea Nacional Constituyente propuesta por el presidente Nicolás Maduro y aproximó a la realidad de la masiva protesta ciudadana en Venezuela, que ya cumple más de 100 días en las calles.
Nicolás Ordóñez (NO): María Corina Machado es vista como una guerrera, al menos en Colombia y muchos lugares del mundo. Usted el pasado 23 de Junio de 2017, en una rueda de prensa de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD), dijo: “A esto nos ha llevado el régimen, al límite”. Explique esa frase.
María Corina Machado (MCH): La tiranía chavista se propuso llevar a cada venezolano al límite: al límite de la indignidad, de la violencia, de la miseria y del silencio. Creyeron que con ello nos quebrarían no solamente física y económicamente, sino moralmente, pero no lo lograron. Hoy Venezuela está de píe y ha decidido avanzar para librarnos de esta tiranía mafiosa y criminal, y con ello iniciar un proceso de transición a la Democracia y reconstrucción económica, material, cultural, institucional y por encima de todo moral y espiritual.
NO: “Vamos derrotando el régimen”, son las frases que se escuchan. Usted que lidera la presión desde las calles, ¿cree que es eso cierto? ¿Cómo va la revolución popular nacional? ¿El regreso de Leopoldo López a su casa da esperanza?
MCH: Son más de 100 días en revolución, en rebelión nacional popular, en todos los rincones de Venezuela, en todas las calles, en todos los sectores del país. Son campesinos, productores, comerciantes, estudiantes, amas de casa, empresarios, todos los sectores de la sociedad y también todas las generaciones. Aquí está desde el joven, muchacho en primera fila enfrentando la represión del régimen, como sus abuelos, como sus padres, como sus hermanitos, consientes que nos estamos jugando la vida, nos estamos jugando la República, nos estamos jugando la Nación. Es una cuestión de dignidad humana y también es una cuestión de dignidad nacional, por eso el mundo tiene que entender la fuerza de lo que hoy se despliega en Venezuela y por tanto no tiene vuelta atrás. Tanto sacrificio, 95 jóvenes asesinados, muchos a quema ropa, mas de 15 mil heridos, cuatro mil detenidos, no ha sido en vano. Estamos en la calle decididos a salvar a Venezuela y a reconstruir una tierra prospera, libre, democrática.
En efecto, vemos como los pilares que sostenían al régimen empiezan no solo a debilitarse, sino a fracturarse. La complicidad internacional se acabó, la complicidad y, digamos, sumisión de los órganos del poder público empieza a distanciarse, como lo es el caso de la fiscal General de la República, Luisa Ortega Díaz, y desde luego lo que se creía un apoyo monolítico al régimen, que son las Fuerzas Armadas, comienzan a voltearse.
La llegada de Leopoldo a su casa, aunque sigue estando preso, es producto de esta enorme fuerza que se ha desplegado en la calle y es desde luego una demostración de las fracturas y los enfrentamientos a lo interno del régimen se profundizan.
NO: En Venezuela se encuentran en “desobediencia civil” y en Colombia en “resistencia civil”, términos acuñados de las revoluciones pacificas ante las dictaduras. ¿Ve alguna relación en lo que sucede hoy en Colombia, a lo que sucedió hace algunos años en Venezuela? ¿Considera que Colombia esta ad portas del socialismo del siglo XXI? De ser así ¿Qué mensaje le da a los colombianos?
MCH: Si algo hemos aprendido los venezolanos, que hace 20 años creíamos impensable la llegada de una tiranía militarista y jamás hubiéramos creído que se instalara un sistema de mafias, es que nunca, nunca, una sociedad libre debe bajar la guardia ante una amenaza totalitaria. La amenaza totalitaria puede llegar y convertirse en realidad, por diversos mecanismos y aproximaciones, una desde luego es el populismo, que con desfachatez engaña y manipula a una sociedad; es también la penetración de grupos irregulares, que disfrazados de vocación democrática penetran las instituciones democráticas y llegan al poder. Todas estas son amenazas que están latentes para los países de América Latina. Tanto dolor en Venezuela ha servido de experiencia y fortalecimiento de la sociedad de cara al futuro para que efectivamente esta haya sido la ultima tiranía que haya puesto pie en Venezuela.
Esperamos que también sirva nuestro dolor y dramática experiencia de ejemplo a los demás países latinoamericanos, en especial a Colombia, una nación a la cual nos une el pasado, el presente y el futuro. Lo dije cuando pude hablar en el Congreso colombiano hace unos años, no habrá paz estable y duradera mientras no exista democracia en Venezuela. Solo cuando en Venezuela salga un régimen que ha sido cómplice con el narcotráfico, la guerrilla y los grupos irregulares en Colombia, es que podremos avanzar juntos en una paz y libertad sostenible para ambas naciones.
NO: Van más 100 días en las calles. Estos soldados civiles que han decidido dar esta lucha de la mano de Dios y de líderes de la tropa civil como usted. Eso lo valoran en Colombia los miles de venezolanos que han encontrado refugio en esta su “patria hermana”, donde según medios de comunicación hay más de un millón de venezolanos que anhelan volver a su país, ¿Qué decirle a esos compatriotas?
MCH: Que hoy más que nunca Venezuela los necesita, muchos hijos nuestros, de esta tierra, han tenido que efectivamente dejar el país en contra de su voluntad, aunque han dejado aquí su corazón, su pasado y también su futuro, y han sido nuestra voz ante el silencio que ha pretendido implantar el régimen a nuestra tierra y desde luego quienes están más cerca como es el caso de Colombia, entienden mejor la urgencia de lo que estamos viviendo.
Esta oportunidad no la vamos a dejar pasar, el régimen está finalmente transitando sus últimos días, producto de la fuerza que se ha desplegado en toda Venezuela y también gracias a nuestros hijos venezolanos que están alrededor del mundo llevando nuestra lucha y obligando a los gobiernos del mundo a poner sus ojos y su respaldo al pueblo de Venezuela.
Por eso, en esta hora les pido que hay que hablar con mas fuerza, más duro con más organización, y desde luego después de este 16 de julio seguir unidos a la gesta histórica que con toda la fuerza y la legitimidad sellará el inicio de la etapa definitiva para la salida de la dictadura.
NO: Dijo usted en las declaraciones a medios, en el marco del regreso de Leopoldo López a casa: “Solo aceptaremos una única negociación, la de la sociedad”. ¿De qué se trata esa única negociación?
MCH: Que ya en el pasado hemos visto como se ha pretendido establecer con intereses externos propuestas que han debilitado la lucha ciudadana, justo en los momentos en que el régimen estuvo en sus puntos más débiles. Fue el caso de abril del 2014 o el caso de octubre del 2016, cuando el pueblo estaba en la calle exigiendo un cambio y transición, y se plantearon falsos, fraudulentos diálogos, con el fin de darle oxigeno y tiempo a la dictadura y en efecto lo lograron.
Hoy estamos tres años después de las protestas de 2014 y estamos 100 mil muertos después, esto hay que detenerlo ya. Venezuela ha salido con un objetivo único, salvar la sociedad y eso comienza con la salida de Maduro y su régimen del poder.
Insisto, de nada serviría que saliera Maduro y que las mafias permanecieran penetrando y controlando nuestra sociedad. Hoy tenemos la fuerza, la sociedad está clara y este 16 de Julio ratificamos esa legitimidad para avanzar, del cual se emana un mandato inequívoco a la Fuerza Armada para colocarse del lado del pueblo de Venezuela y de nuestra Constitución, a la Asamblea Nacional para que proceda de inmediato a la renovación de los poderes públicos ilegítimos y a nosotros mismo a los ciudadanos para que avancemos a lo que hemos llamado la hora cero, que es la etapa definitiva de lucha, toda la presión para que Maduro entienda que solo tiene una sola opción: ponerse a un lado y aceptar los términos y las garantías para una transición en paz a la democracia y a la libertad de inmediato.
