Caracterizado por usar casetes, ruedas para modular el volumen, y una ventana en donde se veía girar la cinta, el Walkman sigue en forma aunque con algunas mejoras en su diseño.
¿Recuerdas en qué escuchabas tu música favorita en la década de los años 90? Sí, en un Walkman para reproducir casetes, de esos a los que tenías que meterle una pluma de escribir para acomodarle la cinta. Este dispositivo surgió en 1979 bajo el nombre de Walkman TPS-L2 y cumple 40 años de existencia.
En la actualidad, para algunas personas es un simple aparato antiguo, mientras que otras lo recuerdan con nostalgia porque marcó una parte de su vida. Todavía existen algunos disponibles en el mercado de segunda mano, o incluso una versión actual fabricada por Sony con pantalla táctil, memoria interna y conexión inalámbrica.
De hecho, en una ocasión se vendió un Walkman con su versión original, nuevo e intacto por más de 1.3 millones de yenes (unos 414 millones de pesos). "Era de una precisión impresionante, hasta tal punto que me pregunto si sabríamos hacerlo de nuevo hoy", dice Hiroaki Sato, ingeniero y creador de los últimos Walkman.
El ingeniero duda que los Walkman actuales pueden seguir utilizándose en los próximos 40 años, sobre todo por la rápida evolución de la tecnología y dispositivos digitales. Pero aunque eso pase, el Walkman no dejará de ser legendario y no habrá ninguno como el original.
