Por querer encontrar un mejor futuro para su familia, un padre y su hija de un año y 11 meses, murieron al intentar cruzar el río Bravo que separa las fronteras de México y EE.UU.
Provenían de El Salvador. La tragedia sucedió el domingo a un kilómetro de un puente internacional donde estaba la esposa.
Ella logró salvar su vida gracias a que fue rescatada por otra persona.
Este hecho de nuevo pone en tela de juicio las medidas antinmigración que establece el gobierno de Donald Trump y hasta donde están dispuestos a llegar quienes anhelan el ‘sueño americano’.