Quito, Ecuador (AP) — Miles de ecuatorianos acudieron el martes a centros de salud estatales para vacunarse contra la gripe AH1N1, que ha registrado un rebrote en las últimas semanas y ha dejado 593 infectados y 57 fallecidos.
El gobierno importó un lote de 300.000 vacunas, de las cuales 100.000 serán destinadas a la provincia de Pichincha, cuya capital es Quito, y el resto principalmente a las provincias de Manabí y Esmeraldas, golpeadas el 16 de abril por un potente terremoto de 7,8 grados de magnitud.
Hasta el 20 de mayo, el ministerio de Salud registraba 338 infectados a nivel nacional, pero en menos de dos semanas la cifra creció a 593.
Ese organismo estatal ha dicho que se priorizará la vacunación en los denominados grupos de riesgo niños, ancianos o personas con afecciones de otro tipo.
Las autoridades han emitido una alerta para que las farmacias no puedan vender libremente medicina antigripal, aduciendo que enmascara los síntomas de afecciones como AH1N1, que pueden derivar en complicaciones más graves y hasta la muerte.
