Realmente es triste y lamentable el estado del cementerio San Rafael, conocido popularmente como el de "los pobres", y es el más extenso de los dos que hay en este municipio, ubicado al sur en el barrio Obrero.
Un promedio de 700 tumbas aproximadamente están deterioradas y otras abiertas con exposición de restos óseos, basuras, restos de ataúdes, bolsas con cráneos y la maleza sobre las fosas, es lo que se observa en el interior de este camposanto.
EL INFORMADOR dialogó con Marcos Camargo López quien es miembro del comité amigos del cementerio San Rafael e indignado por esta situación indicó "aquí en Ciénaga, para nadie es un secreto la realidad de este camposanto, lo que es motivo de preocupación de la comunidad cienaguera, aquí hemos visto la falta de compromiso de las autoridades que tienen que ver con este cementerio, se ha encontrado que es tanta la ausencia de la administración y del señor párroco de la iglesia Sagrado Corazón de Jesús, que no se preocupa por este lugar, ni siquiera para tratar de hablar con el comité, lo hemos invitado a varias reuniones y siempre saca excusa y no asiste".
Camargo López agregó además que "a pesar de la excusitis del padre Misael Díaz, vamos a seguir trabajando por el cementerio, esto repito es falta de administración, yo sostuve una conversación con el señor Alcalde y me comentó que se está haciendo un estudio para un nuevo cementerio y hay quedó eso y mientras tanto este sigue abandonado a su suerte, los recursos por parte del párroco, que recibe por concepto de venta de servicios y de lote, no se sabe a dónde van a parar, y le hemos pedido que se invierta aquí algo de esos recursos y sin embargo nos manifestó que esos dineros son pocos y lo único que le podía pedir al comité era incrementar esos precios, y por ejemplo una exhumación cuesta 35 mil pesos y de ahí la parroquia no daría ni un centavo, y aumentamos precios perjudicaríamos el bolsillo de la comunidad".
El miembro activo de este comité, también afirmó que entiende claramente que las personas que tienen sus deudos aquí deben preocuparse por sus bóvedas lo que no hacen actualmente, y además dijo que llegó el momento que se hable de una fundación para el manejo de este camposanto.Marcos Camargo también se refirió a la situación de insalubridad del cementerio San Rafael y aseveró "es poco lo que he hablado con el nuevo Secretario de Salud y por ahí se comprometió a meterle mano al camposanto, en cuanto a la abatización y otras cosas y eso ha quedado en puras palabras y no le veo el empuje a este funcionario y sería oportuno que la Secretaría de Salud departamental tomara cartas en el asunto y sería mejor, hasta el punto de que enviara una carta donde ordene el cierre de este cementerio, porque la verdad eso es una completa porquería, y lo único que hacen ahí que es lo que más me duele es arrojar a los muertos".
Durante el diálogo con el líder cívico del barrio Obrero quedó de manifiesto su inconformidad porque no es justo que Ciénaga, siendo una ciudad tenga un camposanto como el que se tiene actualmente.
"Da grima y dolor ver como se acaba día a día el cementerio San Rafael y reitero debería cerrarse para ver si así las autoridades hagan algo. Necesitamos algo digno porque desafortunadamente aquí solo ven en el pavimento la solución al desarrollo para este pueblo", dijo.
Cabe recordar que el año pasado cuando estaba de comandante del tercer distrito de la Policía Metropolitana el coronel Francisco Gálvez Alemán tomó una excelente iniciativa de restaurar el cementerio San Rafael, y realizó un censo de las bóvedas dañadas y logró contar unas 280, de ahí se tomó a la tarea de tocar puertas e iniciar una campaña para aportar un ladrillo y cemento para tapar las fosas, logró hacerlo pero de una manera mínima porque la ciudadanía fue apática a esta idea.
Luego fue trasladado el Oficial, y ningún cienaguero retomó dicha brigada, que inició esa persona que no era oriunda de esta ciudad pero que le dolía ver el lamentable estado de este camposanto, que está en cuidados intensivos.
Se conoció además que en el interior de este cementerio, los drogadictos lo han cogido para consumir sustancias alucinógenas y las personas que llegan a visitar a sus difuntos temen a ser atracados por parte de estos viciosos.
