La armonía de los cuerpos moviéndose al ritmo de la música que identifica la leyenda del Caimán, transformando el grito de preocupación de un padre que busca sin cesar a Tomasita, le dan la bienvenida a la fiesta que ayer acabó de arrancar, y que para los cienagueros se vuelve la celebración más bonita.
Con estrofas verseadas como las del primer párrafo y bailes alegóricos a la tradición, Ciénaga empezó a disfrutar del Festival del Caimán Cienaguero en su edición número 52, siendo los protagonistas, los grupos de danzas que participan y que recorrieron las calles del municipio en un sincronizado desfile que partió desde diferentes puntos y se encontraron en la plaza del Centenario, donde realizaron la gran presentación a todo el público presente.