Quien hasta ahora ostenta el triunfo en las elecciones del municipio ribereño, niega la responsabilidad del registrador municipal en el supuesto fraude y los posteriores desmanes. Además dice tener pruebas que vincularían a su opositor Jesús Méndez con lo ocurrido el pasado 27 de octubre.
Ante la incertidumbre que se ha mantenido en San Zenón mientras esperan un veredicto final por los desórdenes ocurridos el pasado 27 de octubre en plena jornada electoral y la determinación de la Comisión Escrutadora Departamental de trasladar todo el material recuperado a la sede del Consejo Nacional Electoral, CNE, para que sean ellos quienes definan si es necesario llevar a cabo o no unas nuevas elecciones, el hasta ahora alcalde electo por el Partido Conservador, Genor Bolaño, explicó su versión de los hechos, contrarrestando las declaraciones dadas en días pasados por su opositor Jesús Méndez.
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Según Bolaño, el día de los comicios inició con total normalidad, sin embargo, avanzada la mañana, amigos cercanos y militantes del movimiento político opuesto empezaron una serie de acciones vandálicas en los corregimientos del municipio, ante la amenaza de pérdida en las urnas.
“Fue así como llegaron hasta las instalaciones de la Registraduría e hicieron presión al registrador municipal buscando cualquier pretexto con el fin de cancelar las elecciones, una decisión que no está en las competencias de dicho funcionario”, manifestó el excandidato, quien además, habría salido triunfante en el preconteo electoral. “Estas acciones concluyeron en el hecho que hoy es noticia nacional: la quema de la Registraduría y la toma de algunos puestos de votación”, añadió.
De acuerdo a la versión entregada por Genor, existen audios en los que, presuntamente, se escucha al personero municipal Cristian Fuentes, instando al registrador para que fuese suspendida la jornada, así como al otro candidato, Jesús Méndez, dando órdenes a sus allegados para interrumpir las elecciones en las poblaciones aledañas. Por lo anterior, Bolaño manifiesta haber hecho las denuncias correspondientes ante los órganos de control.
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“Este fue un hecho lamentable, que nosotros desde todo punto de vista hemos repudiado porque no creemos que la fuerza, el desorden y el vandalismo sea el mecanismo para pretender llegar a un debate electoral en el que no se cuenta con la aceptación ni el aval de las mayorías”.
De igual manera, agregó que pudieron ser salvadas las mesas de los corregimientos Peñoncito, Bermejal, Guinea y Palomar y niega la versión dada por Méndez en la que el registrador municipal es señalado de ser el principal responsable de tales actos.
Al día de hoy, el fallo está en manos del CNE, serán ellos los encargados de estudiar lo ocurrido y decidir sobre el futuro de San Zenón.
“Ahora el llamado es al Gobierno, para que se obre defendiendo el derecho universal al voto, que está por encima de cualquier procedimiento o ley, para que quede sentado un precedente en el país”, puntualizó.