El jefe de la oficina de discapacitados, Ludwing Dávila Méndez, llegó en su silla de ruedas, hacer una diligencia al Juzgado Promiscuo Municipal, el funcionario se vio sorprendido, ya que, no pudo adelantar su cometido, debido a que la edificación no está adecuada para que las personas con algún tipo de discapacidad puedan circular libremente, pero a esto se le suma la avería del ascensor el cual está fuera de servicio desde hace 5 meses.
“Haciendo uso del legítimo derecho de actuar en representación propia en un proceso Ejecutivo, me dirigí a las oficinas del Juzgado Segundo Promiscuo Municipal para adelantar una diligencia propia del proceso, me llevé la triste sorpresa que el ascensor que fue instalado para garantizar el acceso y la movilidad de las personas con discapacidad y baja movilidad como adultos mayores y mujeres embarazadas se encuentra fuera de servicio hace más de 5 meses sin que nada se haga al respecto” anotó Dávila Méndez.
A si como él, muchas personas con las mismas condiciones de discapacidad, han tenido que aplazar, las diligencias, en los juzgados y oficinas de la Fiscalía, todo por no tener la facilidad de movilizarse por el edificio ubicado en la calle 7 con carrera 11, así mismo, tampoco existe una rampa de acceso para estas personas en casos de emergencias.
Por lo tanto, Dávila Méndez, solicitó a través del EL INFORMADOR, exigir de manera urgente, que este ascensor sea reparado.