Para quienes conducen, aún falta infraestructura y una labor de las autoridades para explicar las infracciones a la que se ven obligados a pagar.
Teniendo en cuenta la socialización que está llevando a cabo la Alcaldía de Santa Marta con respeto a la entrada en vigor, luego de la suspensión hecha el pasado 18 de diciembre del 2018, del sistema de fotomultas para sancionar a quienes infrinjan las normas de tránsito en el perímetro urbano de la ciudad, EL INFORMADOR se tomó las calles para indagar con los diferentes actores viales sobre la pertinencia de esta medida, y del comportamiento de los conductores en las principales arterias viales de la samaria.
Para ello se indago entre varios conductores de diferentes índoles, con el fin de ahondar en los aspectos de fondo que repercuten de forma directa en la implementación de la norma, como lo son, el estado de la infraestructura vial, la suficiencia de agentes de tránsito en los sectores de mayor afluencia de tráfico, la cultura de transito de quienes manejan en Santa Marta, entre otros aspectos.
El sondeo realizado, dejó al descubierto, entre otras cosas, la inconformidad de los conductores con la implementación del sistema, ya que muchos ven esta medida como un mecanismo de recaudación de dinero, que no se ve reflejado en el mantenimiento de la malla vial, ni en inversión de infraestructura en temas de movilidad en la ciudad.
Saúl Arévalo, un conductor de automóvil particular, considera que, en algunos semáforos de la ciudad en los que funciona el temporizador para el cambio de luz, hace falta una mejor regulación, ya que a veces, “la reducen a menos tiempo para que el usuario caiga en la fotomulta”, manifestó.
Para otros, esto contribuye a generar consciencia ciudadana, y a culturizar a los samarios, ya que “en Santa Marta y en la costa tenemos mucho atraso cultural, siempre hemos estado al libre albedrío, entonces antes de empezar a multar se debería intensificar en la enseñanza, la educación, la pedagogía”, aseguró Frank Redondo, un transportista de carga, que asegura que, aunque es buena la iniciativa, “no estamos preparados para este sistema”.
Junto a ello coincide en que hace falta incrementar el pie de fuerza de los agentes de tránsito, y mayor preparación por parte de los que ya están ejerciendo sus funciones, al asegurar que, “son pocos los que se ven en las calles”, agregó.
Varios de los conductores entrevistados, aseguraron que los biciusuarios deberían ser sancionados.
Dentro de las personas consultadas, en las que se encuentran conductores de vehículos particulares, motociclistas y transportadores de carga, es posible identificar que para ellos, los actores viales que más infringen las normas de tránsito son los motociclistas, quienes realizan maniobras peligrosas, como adelantamiento por la derecha, invasión del espacio público, entre otras acciones que los hacen blanco fácil de las fotomultas.
Por último, José Yance, un motociclista consultado aseguró que el Distrito debería tener en cuenta la creación de espacios exclusivos para los biciusuarios, teniendo en cuenta que son parte de los actores viales que más infringen las normas, y que no son sancionados por el Código de Transito, ni por el sistema de las fotomultas.
Cabe recordar que, desde el pasado 2 de diciembre, los infractores recibirán comparendos educativos, los cuales no tienen ningún costo económico ni administrativo, en el sentido que tengan que realizar algún curso. Esto solamente es el tiempo para que la ciudadanía se familiarice con la medida.