Los contenedores, que se presentaron como la solución a los problemas de las basuras regadas en las calles, son utilizados para depositar todo tipo de desechos y permanecen rebosados.
Por: Anayancy Vidal H.
Redacción EL INFORMADOR.
Fotos: Edgar Fuentes y Orlando Marchena.
Los contenedores de basuras dispuestos en toda la ciudad por parte de la Empresa de Servicios Públicos de Santa Marta, Essmar, junto a Interaseo, en agosto del año pasado, en principio fueron bien recibidos, pues se suponía que con estos se optimizaría el aseo y mejoraría la imagen de la capital del Magdalena.
Pero tal parece que estos recipientes de desechos están siendo mal utilizados por los ciudadanos, quienes terminan depositando en ellos todo tipo de elementos como maletas, troncos, colchones, muebles viejos, entre otros.
‘Hasta el teque’ se encuentran los contenedores dispuestos en las principales calles y avenidas de la ciudad, debido a que se rebosan mucho antes que pasen los vehículos compactadores a vaciarlos, además que la situación dificulta el proceso de recolección.
Moradores de la calle 30, cerca de la segunda entrada al barrio El Pando, denuncian la “poca cultura ciudadana” de algunos vecinos, quienes arrojan los materiales ya mencionados y los desechos luego de hacer ramajeo en las calles aledañas a estos contenedores.
Los denunciantes manifiestan que los residuos vegetales no deben ser arrojados adentro de los contenedores y que para eso existen otros lugares autorizados.
En las fotografías realizadas para la página EL INFORMADOR Cívico, se aprecia que además de ocupar todo el espacio del recipiente, los ciudadanos dejaron otros elementos como escombros.
Las góndolas del Mercado Público
Otras que siempre se encuentran ‘hasta el teque’ son las góndolas ubicadas en los alrededores del Mercado Público, de las que emanan fuertes olores, bien sean de los lixiviados o de los animales muertos que en ellas arrojan.
Por otra parte, está la preocupación de algunos samarios, pues dicen que hay épocas en que se demora en pasar el camión que compacta la basura y aun así siguen depositando sobre las montañas de desechos, atrayendo habitantes de calle a escarbar y perros callejeros a regar los contenidos en busca de alimento.
Durante los puentes festivos se hace más evidente esta problemática, ya que la recolección de basura disminuye y los contenedores se rebosan de desechos.
Algunos habitantes de la ciudad han reclamado que ya la situación se ha hecho recurrente y han tenido que elevar su voz de protesta ante las autoridades locales con el fin de que se les sea prestado un servicio eficiente, óptimo, consecuente con lo que pagan mensualmente en la factura