El Camellón de la Bahía es uno de los atractivos turísticos más emblemático de la ciudad y también el que más olvidado se encuentra, está completamente destrozado, no se salva un solo espacio de este malecón, donde no se refleje el olvido y la desidia.
Los fenómenos naturales que se han presentado recientemente han acelerado el deterioro del camellón, han terminado de levantar las losas del piso y destapado las redes tanto del sistema de acueducto y alcantarillado como las eléctricas. Son múltiples los peligros a los que se exponen los samarios y turistas que visitan este lugar, que se ha convertido en algunos sectores en letrina pública y espacio para consumidores de sustancias alucinógenas. Del Camellón de la Bahía no queda nada, el piso está dañado, las bancas están hechas pedazos, los adoquines destruidos, las palmas muertas en su mayoría, la zona del espacio donde se halla el monumento de Rodrigo de Bastidas se ha convertido en un baño público y además, la hierba está creciendo aceleradamente y tapando todo lo que un día fue un jardín. Los samarios continúan solicitando al Distrito y al Gobierno Nacional la pronta intervención del Camellón, la recuperación de este espacio, que además de turístico tiene un gran valor histórico para la ciudad. En días pasados, la ministra de Industria Comercio, y Turismo, Maria Claudia Lacouture, inspeccionó el Camellón acompañada de diferentes autoridades, los residentes de la ciudad esperan ver muy pronto los frutos de dicha visita.
