Comunidad de Bastidas denuncia los atrasos y la suspensión de la obra del colegio, el cual estaba proyectado para terminarse en seis meses y en enero del próximo año cumplirá 24 desde que inició su intervención.
Por: María José Andrade
Redactora EL INFORMADOR
La preocupación por el futuro del colegio de Bastidas es en general, tanto la Junta de Acción Comunal, los padres de familia y la comunidad se están organizando para el próximo año suspender las clases, debido a las pésimas condiciones en que los niños las reciben.
Según la Junta de Acción Comunal, la obra tiene un atraso significativo, que va en detrimento de la calidad educativa de los niños y jóvenes de Bastidas.
“Es una obra que se proyectó para 6 meses y está próxima a cumplir los 24, no ha llegado ni al 40 % de ejecución, donde 2.783 niños se ven perjudicados directamente”. Expresó Juan José Vargas, presidente de la Junta de Acción Comunal.
Afectaciones
Los estudiantes no están recibiendo los beneficios del Gobierno Nacional.
“No les están ofreciendo lo que es el PAE, el Plan de Alimentación Escolar, no pueden salir al recreo porque no hay espacio, algunos alumnos están en completo hacinamiento y además tenemos 200 niños para una sola tasa sanitaria, esto es una crisis ”.
Los residentes de Bastidas están desesperados por baja calidad educativa que al aparecer tienen los niños y jóvenes del sector.
“Solo estamos exigiendo la terminación del colegio, sea el contratista que sea, eso es una obra fantasma, hace tres meses está abandonada, nadie nos da respuesta, hay un silencio, un hermetismo total”.
Quieren unos contratistas responsables sin importar de donde vengan.
“Exigimos que terminen el colegio, no nos interesa de donde vengan los contratistas, solo queremos el colegio, esos contratistas que llegaron le quedaron debiendo a la comunidad, trabajaban sin seguridad social, era un desorden total , además se dicen que ya se gastaron 14 mil millones de pesos y ahí no hay nada, necesitamos respuestas, exigimos respuestas”.
Como si fuera poco la comunidad también denuncia que por las malas condiciones en que reciben clases los niños, se está presentando deserción escolar.
“Tenemos deserción escolar, hay muchos padres que no quieren matricular a sus hijos por las condiciones infrahumanas en que están”.
El 17 de enero del próximo año, el inicio de las obras del colegio de Bastidas cumplirá dos años, para la desdicha de la comunidad.