Ocho meses de espera y el puente de Bálsamo sigue en el suelo

El pasado 18 de diciembre cayó el puente al piso y hasta el momento las autoridades no han realizado una acción para su construcción.

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Luego de la caída de la estructura, la Alcaldía de Concordia anunció la colocación de un puente militar como solución preventiva, sin embargo, ésta no cumplió con los requisitos y a la comunidad le ha tocado trasladarse en canoas, mientras se construye el nuevo paso.

Por: Víctor Peñaloza
Redacción EL INFORMADOR

Las aguas de la quebrada El Mundo se llevaron consigo el puente ubicado en el corregimiento de Bálsamo, municipio Concordia. Este hecho ocurrió el 18 de noviembre del 2017 y hasta ahora las autoridades no han levantado la estructura; la vía quedó incomunicada.

El concejal de Concordia, Luis Alberto Freire, expresó que la avalancha ocurrida a finales del pasado año fue muy fuerte y terminó derribando los pilares que sostenían el puente de El Mundo.

“Este puente tenía 15 años de funcionamiento y nunca había sido sometido a un mantenimiento adecuado de su construcción”, explicó el cabildante.

El puente está ubicado en el corregimiento de Bálsamo, a tres kilómetros de la cabecera municipal de Concordia y por esta vía, que es intermunicipal, se comunica esta jurisdicción con los municipios de Pedraza, Zapayán, Chibolo y Plato.

Los habitantes de la zona al no ver respuesta del gobierno municipal, departamental y nacional, aplicaron la llamada “ingeniería local”, construyeron un planchón con la unión de tres canoas y unos tablones para que las personas, motos y hasta el ganado pudiera cruzar la quebrada.

“Con bombos y platillos, el alcalde de Concordia, Pedro Ospino, entusiasmo e ilusionó a la comunidad con un puente militar. Sin embargo, esto se quedó en una ilusión porque esa estructura no cumplía con las condiciones mínimas, a pesar que hubiese sido una solución provisional, mientras se le da la solución definitiva a la problemática”, expuso el noncejal.

 “Hay que actuar antes que pasen situaciones que lamentar”

 El concejal Freire admitió que la situación que viven los habitantes de este sector cada vez es más caótica en todos los sentidos, destacando el tema de la salud.

“Hay una población bastante representativa, más del 70 por ciento de las fincas quedan de aquel lado del puente. Esto no solo ha afectado la movilidad, sino también que enciende las alarmas en el tema de salud; las personas que prestan sus servicios en las canoas lo hacen hasta las 6:00 p.m., entonces si pasa algo grave ni Dios lo quiera como hace la comunidad para trasladarse, hay que actuar antes que pasen situaciones que lamentar”, reclamó el Concejal, quien agregó que cerca de 200 familias están afectadas por el derrumbe del puente.

Por su parte, Andrea Orozco Montero, habitante de Bálsamo,  explicó que la balsa en la que se transportan está bastante deteriorada. “A la canoa le está entrando mucha agua y es un riesgo cruzar en ella y más cuando esta quebrada tiene una corriente fuerte por las lluvias. Yo temó al cruzar, allí van animales, motos, niños, es un peligro”.

La vida se puso cara, los agricultores y  ganaderos afectados

Otro de los aspectos que se suman a la problemática de los habitantes de Bálsamo es lo complicado que se la ha puesto la situación económica, los productos los consiguen caro y a ellos se les dificulta trabajar.

Orozco Montero, señaló que la caída del puente los está llevando a una situación pésima. “A los agricultores a diario les cobran el transporte por sacar sus productos, en este caso el costo le sube depende el medio que utilicen, esto es bastante sufrido por todos. Cuando se trata de cruzar el ganado es un cuento, el precio es considerable y a veces las reses no se tiran porque les toca atravesar una parte de la quebrada”.

Orozco Montero expuso que antes llegaban al corregimiento vendedores de otros pueblos, algo que ya no sucede y a ellos les toca salir a comprarlos. “Esto hace que gastemos más”.

Autoridades deben definir las acciones a emprender

A pesar que el pasado 12 de diciembre en una sesión ordinaria el diputado de la Asamblea Departamental del Magdalena, Luis Vives, dio a conocer la problemática que atraviesan estos municipios por el derrumbe del puente, palabras que hicieron eco en los diferentes medios de comunicación del departamento,  las autoridades competentes no han asumido el compromiso.

El pasado martes el diputado aprovechó la citación del secretario de Infraestructura de la Gobernación, Ricardo Vivas, para volver a preguntar por la situación del puente, sin embargo, consideró que no hubo una respuesta certera acerca de las acciones que se deben emprender para resolver la problemática.

“El Alcalde y el Secretario de Infraestructura se deben sentarse a revisar cuales son las alternativas y ponerle fecha a la solución de este problema. La comunidad lleva muchos meses esperando; entonces los encargados de darle solución a este tema deben decirle si hay un proyecto o una solución definida”, expuso Vives. 

El 17 de este mes el Bálsamo cumplirá ocho meses sin puente y con un camino de promesas no cumplidas en su afán por regresar a una normalidad que fue cambiada por una corriente que se llevó una infraestructura que les permitía movilizarse sin riesgo y sin perdidas en el comercio de sus productos.

Los habitantes temen que pueda suceder un hecho que lamentar, porque las canoas en ocasiones van cargadas de mucho peso.
En estas canoas se movilizaba la comunidad para atravesar la quebrada. Foto: Cortesía La Hoja Sin Tinta.
Así quedaron las bases del puente derrumbado. Foto: Cortesía La Hoja Sin Tinta.
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200 familias se han visto afectadas por la caída del puente. Esta situación ha perjudicado también la movilidad y comunicación vial entre los municipios Concordia, Pedraza, Zapayán, Chibolo y Plato.