En los operativos fueron halladas más de 2 toneladas de marihuana listas para su comercialización.
Miembros de la Policía Nacional, adscritos al Grupo de Antinarcóticos de la Regional No. 8, propinaron un duro golpe a la Banda Criminal “Los Pachencas” al servicio del narcotráfico que delinquen en el Magdalena, al lograr la ubicación y destrucción de dos centros de acopio, y un laboratorio, que tenían destinados para el procesamiento de clorhidrato de cocaína y marihuana en las estribaciones de la Sierra Nevada de Santa.
Mediante labores investigativas y control de zona realizada por los Comandos Jungla de esta especialidad, y gracias a información suministrada por la ciudadanía, donde daban información a las autoridades, sobre la ubicación varios centros de acopio para el procesamiento ilegal del alijo, ubicados en zonas rurales de la Sierra Nevada de Santa Marta.
Las operaciones fueron realizadas en la parte alta de la vereda la Mojana, jurisdicción del Municipio de Ciénaga, y en zona rural de la vereda Girocasaca, jurisdicción del corregimiento de Bonda de la ciudad Santa Marta, fueron hallados estos tres campamentos camuflados entre la vegetación para evitar ser detectados por las autoridades, los cuales estaban fabricados rústicamente en madera y cubiertos en plástico, donde se hallaron 2 toneladas y media de marihuana seca, empacadas en varios bultos, listos para su comercialización, en todo el departamento del Magdalena, y que fueron destruidas en el sitio de forma controlada, avaluada aproximadamente $555’450.000.
Uno de estos centros de acopio funcionaba como laboratorio para el procesamiento de clorhidrato de cocaína, el cual tenía una capacidad de producción mensual de 500 kilos del alcaloide, donde fueron hallados, 35 galones de ácido sulfúrico, 30 galones de gasolina, 65 galones de disolvente, 30 galones de amoniaco, 25 kilos de urea, 30 kilos de soda cáustica, 4 kilos de carbón activado, 1 quemador, 2 plantas eléctricas, 35 galones de ácido clorhídrico, 2 escurrideros, 01 prensa hidráulica, 2 hornos microondas, 8 marquillas, 1 electrobomba, 1 lavadora, y 2 cilindros de gas de 40 libras, dichos elementos eran utilizados para el procesamiento de la droga, avaluados en $50.000.000.
Con estas operaciones se logra golpear de manera directa las finanzas de esta banda criminal, reduciendo notablemente las capacidades logísticas, compra de armas, explosivos e insumos para el procesamiento de alucinógenos, logrando sacar de circulación al menos unas 600 mil de dosis, que serían comercializadas en el mercado local de la región.