Los cobros desde el punto penal le dieron el título a Ciudadela 29 de Julio superando a Cundeportes Funza 3-1 durante la definición del VI Ponyfútbol en Medellín.
Las samarias cumplieron la mejor campaña, quedaron invictas sin recibir goles y con la máxima anotadora del certamen.
"Se siente una alegría inmensa porque se trabajó con el apoyo de los padres, con mi compañero Ramón Zúñiga, el dirigente Ignacio Miranda y todo salió adelante por el esfuerzo y la gallardía porque ninguna empresa privada ni ente deportivo nos apoyó, entonces todo se lo debemos a los padres", comentó el técnico Hesgar León Ardila.
León Ardila, oriundo de Bonda, estuvo acompañado de Ramón Zúñiga en las decisiones técnicas y en los momentos más complicados del torneo, como por ejemplo las semifinales ante San Javier el Salado y la final contra Cundeportes Funza.
"El cambio fue drástico en los dos últimos partidos porque por primera vez juegan un campeonato muy duro. Miles de personas, se notó un poco la angustia, pero gracias a Dios se sacaron los partidos adelante y sumamos las victorias", dijo.
Ciudadela 29 de Julio de Santa Marta tuvo a la goleadora del torneo, Maryeris González Daza, con 4, y la valla menos vencida sin anotaciones a Maryuri Rincón Silva.
"Yo les dije que tomaran conciencia. Siempre les dije lo mismo, se los reiteré que pensaran en todo lo que pasamos para llegar a Medellín y que todos esos esfuerzos se debían ver reflejados en cada partido. Gracias a Dios tenemos buenas pateadoras, estábamos confiadas de las pateadoras y la arquera", apuntó Hesgar León.
En la campaña, Ciudadela 29 de Julio de Santa Marta, disputó seis partidos, ganó cinco y empató uno.
En la primera fase venció 3-0 a La Cumbre Talentos Caldas, luego por el mismo marcador vapuleo a Florencia y cerró esta etapa con un 2-0 sobre Nechí.
En Cuartos, superó 2-0 a Cañaveral de Ibagué, lo que le permitió avanzar a semifinal donde doblegó 1-0 a San Javier el Salado. En la recordada e histórica final, empató 0-0 con Funza hasta en tiempo suplementario. Luego ganaría en penales 3-1.
"Aquí hay una base de jugadoras que pertenecieron a la selección Magdalena que fue al Nacional categoría 2000, pero las niñas en realidad son 2001, sino no pudieran estar en el Ponyfútbol donde llegaron con más roce y experiencia", apuntó León.
"Gracias a la arquera"
Maryeris Paola González Daza no nació en Santa Marta, pero desde los 7 años, juega fútbol en canchas de colegio y barrios.
Ella fue la goleadora del torneo y una de las figuras de la nómina campeona.
Cursa octavo grado en el Inem Simón Bolívar, colegio donde le vieron sus dotes de jugadora que la llevaron a levantar el máximo trofeo en la cancha Marte 1 de Medellín
"La verdad era algo que estaba esperando hace rato y gracias a Dios se nos dio, apenas jugamos un año el Ponyfútbol y gracias al esfuerzo de las compañeros se alcanzó el título", dice la joven de 13 años, oriunda de Aguachica, Cesar.
Maryeris marcó ante La Cumbre Talentos Caldas, luego le marcó a Nechí. Ante Cañaveral también se reportó con gol y anotó el gol contra San Javier el Salado que las llevó a la final.
En la tanda de penales no pateo, sus amigas, Charol Caballero, Andrea Pérez y la arquera Paola Rincón se encargaron de anotar en la definición del título en penales."Los profesores no dijeron que jugáramos con calma, que el gol llegaba, no llegó pero en los penales si pudimos. En los penaltis no nos asustamos, pero si estábamos confiadas porque lo pusimos en manos de Dios y le dimos confianza a la arquera y todos vieron como se defendió.
La felicitamos y le dimos las gracias porque por ella fue que ganamos", dice la joven delantera.
El rendimiento del equipo en el partido final no fue el mejor, tanto técnico como jugadoras lo reconocen, pero hoy todo quedó atrás con la obtención de la corona."La final fue un partido muy duro, y diferente a los anteriores porque tuvimos un rival muy fuerte que nos obligó irnos a penaltis. Allá la mayoría de gente nos dabas a nosotras, y no nos dio miedo porque nosotras tenemos algo, jugamos cada partido como si fuera la final, para que la final sea un partido normal y así lo hicimos", comentó.
El recibimiento en casa fue con caravana, paseo, música y muchas fotografías.
"Mi mamá -Blanca Daza- me recibió con los brazos abiertos, muy emocionada, fuimos a la caravana, los vecinos también me recibieron con música, globos, carteleras. Fue muy bonito", explicó.Alfonso M. Lara Támara
Periodista EL INFORMADOR
Foto Óscar Mejía