Atlético de Madrid pegó primero

Los rojiblancos derrotaron al Bayern de Múnich por 1-0 y dan un paso de gigante para estar en la final de Milán el próximo 28 de mayo.

Deportes - Int.
Tamaño Letra
  • Smaller Small Medium Big Bigger


El Atlético de Madrid sigue soñando en Europa. Los de Simeone derrotaron al Bayern de Múnich por 1-0 y dan un paso de gigante para estar en la final de Milán el próximo 28 de mayo. Todo se puso de cara para el Atlético muy pronto, a los diez minutos, cuando Saúl, con una jugada maravillosa, tumbó a todo el que se puso por delante, se sacó un preciso disparo y adelantó a los rojiblancos, que jugaban a lo que querían.


Los de Simeone imponían su ley ante un Bayern incapaz de meterle mano a su rival. Un guion de dominio y peligro rojiblanco que se mantuvo hasta el descanso. Después, mandaron los alemanes. Guardiola despertó a los suyos y tras la reanudación asediaron al Atlético, que se encerró en su área. Alaba rozó el empate con un potente zapatazo que pegó en el palo.


El conjunto rojiblanco quería un gol sí o sí. No había otra perspectiva en su pizarra desde el vestuario ni en su actitud sobre el terreno de juego, impetuosa, descomunal como la cita que tenía ante sí. Lo intentó Saúl Ñíguez y después Fernando Torres con una jugada individual, mientras el Bayern sentía un agobio constante.


En esas circunstancias, estresantes para el equipo alemán, una y otra vez limitado a su parte del campo, una y otra vez atascado en pases que sí o sí terminaron entonces en el muro en tres cuartos del bloque madrileño, Saúl propuso y culminó una acción personal asombrosa. Desbordó a un rival, después a otro, a otro y a otro más.


Ya dentro del área, sorteados cuatro adversarios, se perfiló para lanzar un tiro sutil, con la izquierda, al otro palo, fuera del alcance de Manuel Neuer entre la ‘explosión’ de la grada por un gol y una jugada espectacular de un futbolista de tales condiciones, por potencia, por regate, por fortaleza, por capacidad goleadora.


Primer objetivo conseguido, a los diez minutos, con un golazo de Saúl, extraordinario, y cambio de registro, sin echarse demasiado atrás, pero más a la expectativa, más preparado para el contragolpe entre la posesión del Bayern, de su intención de romper por las bandas entre Douglas Costa y Kingsley Coman. Y sin Ribery ni Muller.


Desde el vértigo por la banda del brasileño y del francés, desde la llegada del chileno Arturo Vidal, creció el conjunto alemán hacia el campo contrario, en el que también se siente a gusto el Atlético. Cuando se trata de defender, para guardar un botín, el equipo de Simeone es una roca. deja el balón al rival, pero concede poco más.


Ni pierde el sitio, ni decae su intensidad, ni hay fisuras en su milimétrica ocupación de los espacios. Le rondó el Bayern por su área, pero ocasiones ni una en todo el primer tiempo; algún centro desde los costados, un par de disparos lejanos y nada más. En el otro lado, Neuer evitó el 2-0 frente al francés Antoine Griezmann.


El resto del encuentro ya estaba trazado desde el 1-0. Y tocaba sufrir. Lo intuía Simeone cuando movía los brazos pidiendo el aliento del público en el inicio del segundo tiempo y lo comprobó el equipo minutos después, con un trallazo lejano de Alaba, violentamente estrellado y repelido por el larguero rojiblanco.

Pero la victoria del equipo rojiblanco, no le servirá de nada si no consigue defender el 1-0 en casa del Bayer, cuando juegue el compromiso definitivo.

Pero la victoria del equipo colchonero no le servirá de nada si no consigue defender el 1-0 en casa del Bayer.
Los de Simeone imponían su ley ante un Bayern incapaz de meterle mano a su rival.
Los rojiblancos derrotaron al Bayern de Múnich por 1-0 y dan un paso de gigante para estar en la final de Milán el próximo 28 de mayo.
Previous Next Play Pause