El exjugador del Unión y Vigía FC, narró los momentos gloriosos y complicados en su corta carrera como futbolista.
En la foto Andrés Buelvas en su paso el Zulia equipo venezolano.
Unión Magdalena siempre será recordada en Colombia por ser uno de los clubes que aportó al crecimiento futbolístico del país. Desde la fundación del equipo en 1953, el Ciclón Bananero, como es conocido, ha sido fuente de números futbolistas que con su gran talento lograron enamorar a cientos de aficionados, unos con más suerte que otros, claro está. Uno de esos ejemplos es Andrés Buelvas Del Toro, un delantero con estampa de ‘calidoso’.
Todos los hinchas del Unión recordamos al ‘rapidísimo’ Buelvas, ese que ingresaba en los segundos tiempos para solucionar partidos complicados. Rápidamente igual que su manera de encarar se convirtió en uno de los referentes jóvenes del equipo de la mano Eduardo Retat.
El delantero quien hoy tiene 34 años debutó en el profesionalismo con el Unión Magdalena en el año 2004, hoy el retirado del fútbol, narró sus días de glorias con el equipo samario y de cómo su vida dio un giro de 180 grados a raíz de una penosa enfermedad que lo alejó de las canchas en su mejor momento.
EL INFORMADOR:¿A qué se dedica en la actualidad Andrés Buelvas?
Buelvas: Bueno nunca me he alejado del fútbol, porque esto me ha dado tanto momentos lindos, amigos, mi familia y recuerdos a los que atesoro con gran amor. Ahora estoy como instructor con la caja de compensación Cajamag y ahí estoy preparándome.
EI: ¿Qué significa para usted las muestras de cariño que le entrega la gente cuando lo ven en la calle?
AB: Me llena de una alegría inmensa que aún me recuerden con cariño, porque la verdad siempre trate de ser un gran ser humano dentro y fuera de las canchas. Siempre estoy dispuesto a jugar en cualquier partido al que me inviten así me encuentro con amigos de toda la vida y me hacen recordar esos momentos mágicos con el Unión
EI: ¿De esos momentos gloriosos con el Unión cual recuerda más?
AB: El momento que más recuerdo con el Unión, un partido que teníamos que ganar aquí contra el Pasto, en el estadio estaba Carlos Vives, yo venía de la selección Colombia (Sub 23 la dirigía Jaime De La Pava), el profesor Retat me dejó para el segundo tiempo, minuto 36 más o menos, en esos momentos Carlos Vives sale del estadio y casi de inmediato meto el gol, entonces decían que Carlos Vives era tenia al equipo ‘salao’, partido para no olvidar.
EI: ¿ Cómo fue el gol?
AB: De todo me acuerdo. ‘Pachequito’ llevaba el balón, Valenciano hace la diagonal y todos los defensas se van con él, ya que era el goleador del equipo, y ‘Pachequito’ me la tiró a mí y quede frente al arquero y logré empujarla para meter el gol y darle los tres puntos al Unión y ayudar a clasificarse dentro de los ocho.
EI: ¿Que vino después del Unión?
AB: Hay muchos momentos buenos con el Unión, pero mi mejor presente futbolísticamente hablando fue en Venezuela cuando jugué para el Vigía F.C. donde logre el ascenso con el plantel. En mi paso por este equipo logré marcar 86 goles, todavía es la hora y la gente me dice que vaya y que juegue así como estoy. Jugué en Venezuela durante ocho años y pase por diferentes equipo como el Zulia, Carabobo, entre otros, fue tal mi éxito que tenía muchas propuestas, pero todo se vino abajo a raíz de una enfermedad.
EI: ¿La enfermedad truncó su futuro?
AB: Siempre digo que Dios, pone las pruebas más fuertes a los más valientes y eso me paso a mí. A raíz de mi enfermedad todo los planes se dañaron, al principio fue duro para mí no poder jugar y con tanto para dar, pero mi familia me ayudó demasiado y por ello es que peleo todos los días con este pequeño problema como le digo. Pero como dijo Pelé: me retiré en mi mejor momento.
EI: ¿Sus tres hijos le sacaron el amor por el fútbol?
AB: Juan José, Andrés Felipe y Mauricio, los tres están pequeños, pero aman el fútbol como su padre. Los tres juegan bien. Esperemos que llegue más lejos que yo y que puedan cumplir algunos de los sueños que yo no pude.
