Independiente Santa Fe se bastó con un discreto empate sin goles en Bogotá para avanzar a la final de la Copa Sudamericana a expensas del Sportivo Luqueño paraguayo, que en el partido de ida había cedido un 1-1 en Asunción.
El equipo cardenal no estuvo para el espectáculo y prefirió concentrarse en un esquema más conservador de lo previsto, toda vez que el equipo paraguayo necesitaba marcar en Bogotá toda vez que los goles marcados en cancha ajena tienen un valor agregado a la hora de dirimir los empates.
Santa Fe espera en la final al ganador de la serie entre los argentinos River Plate, ganador de la pasada edición de la Copa Libertadores, y Huracán, que en el primer encuentro sorprendió al imponerse a domicilio por 0-1.
